Mucho se ha hablado de los cuidados y medidas de higiene que debemos de tener para protegernos del coronavirus y si bien todas esas medidas son importantes, el reforzar el sistema inmunológico representa una de las más importantes para contar con las defensas necesarias para combatir cualquier enfermedad, por eso, aquí te damos algunos consejos que puedes implementar.
- Mantente activo: la actividad física hace que los anticuerpos y los glóbulos blancos del cuerpo circulen con mayor rapidez, lo que ayuda a detectar y concentrarse en los virus más rápidamente, además de disminuir las hormonas del estrés, lo que reduce las posibilidades de enfermarte.
- Cuida tu alimentación: el 80% del sistema inmunológico está en el intestino, así que cuando está sano, solemos ser capaces de combatir las infecciones más rápido y mejor.
- Procura mantener una alimentación rica en frutas, verduras, granos enteros y grasas saludables, que se encuentran en alimentos como pescados grasos, nueces, aguacate y aceite de oliva.
- Limita la carne y en especial los alimentos procesados y fritos, que son los que más contribuyen a la inflamación.
- Cocina con hierbas como ajo, jengibre, romero, orégano y cúrcuma, al ser antiinflamatorios naturales.
- Incluye en tu dieta fermentados, como el yogur, el chucrut, el miso y el kéfir, ya que ayudan a desarrollar las bacterias buenas en el intestino al contener probióticos.
- Consume alimentos ricos en vitamina A y betacarotenos como camote, zanahoria, papaya, etc.
- Alimentos con vitamina C como cítricos (naranja, mandarina, fresas, arándanos), pimientos, brócoli y kiwi.
- El zinc es clave para nuestro sistema de defensas. Lo podemos encontrar en semillas de calabaza (las puedes incluir en tu avena o ensaladas) y frutos secos.
- Consume alimentos ricos en fibra, un componente muy importante que interviene en la función del sistema inmunitario promoviendo el crecimiento de tu flora bacteriana.
- Evita el alcohol, el azúcar y la comida procesada como empacados, comida rápida, frituras, etc.
- Cuida el estrés: existe un fuerte vínculo entre la salud inmunológica y la salud mental. Mantente en calma, una buena forma de hacerlo es por medio de la meditación. El agradecimiento por su parte nos permite concentrarnos en lo positivo de la vida y está comprobado que nos lleva a niveles de vibración altos y poderosos que nos permiten reconocer y estar en paz.
- Duerme lo suficiente: el sueño es otro refuerzo natural del sistema inmunológico. Procura dormir mínimo siete horas diarias. Cuando no duermes lo necesario, tu cuerpo produce hormonas de estrés como el cortisol para mantenerte despierto y alerta, lo que puede suprimir tu sistema inmunológico.
- Toma el sol: pasa al menos 30 minutos al sol cada día con ropa clara o descubierta, para producir vitamina D. En el caso de que no puedas hacerlo, debes evaluar la toma de un suplemento según tus requerimientos por edad y sexo.
El cuidarnos está en nuestras manos, es el mejor regalo que podemos darnos a nosotros y nuestra familia.